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Congelar nécoras

Congelar y descongelar nécoras gallegas

Hoy hablaremos de cómo podemos aprovechar el sabor y frescura de las nécoras para congelarlas en caso de ser necesario y aprovechar su sabor y versatilidad pasadas las semanas de su compra.

Cuando compramos marisco gallego y fresco, tendemos a pensar que debemos consumirlo en el momento para no perder el sabor del producto. Y si bien es cierto que la frescura de un marisco es un factor principal a la hora de degustarlo, tenemos otras opciones para aquellas piezas de marisco que no podamos consumir en el momento.

Hacemos un pedido de marisco ya sea para una cena especial, para una quedada con familiares y/o amigos, para una cena romántica, cumpleaños o Navidad, pero tendemos a comprar piezas justas para que no sobren y echarlas a perder. Sin embargo, a la hora de hacer un pedido, podemos aprovechar para elegir productos que son de temporada, como en el caso de las nécoras, ya que no las encontramos en otros meses del año y no siempre al mismo precio.

Uno de los trucos de los que hemos hablado en pasados post, es la opción de comprar en verano para consumir, por ejemplo, en Navidad. Este tipo de acciones nos permite disfrutar de un marisco que llega vivo a nuestra casa, de procedencia gallega y gracias a trucos como el de hoy, conociendo su fecha y condiciones de congelación.

A menudo podemos ver en grandes superficies marisco congelado sin conocer su procedencia, calidad y origen. Sin embargo pidiendo marisco GALLEGO y FRESCO, conseguimos disfrutar de un marisco de calidad en cualquier fecha.

Congelar nécoras gallegas

No bastará con congelar las nécoras y meterlas en una bolsa. Aunque pueda no parecerlo, las nécoras son productos muy delicados que tratados en condiciones apropiadas puede convertirse en un fondo de cocina con múltiples usos a lo largo de todo el año.

Como muchos y muchas ya sabéis, nuestro marisco no sólo es gallego, si no que llega completamente vivo a tu domicilio. Este tipo de producto ha pasado 24 horas o menos fuera del mar, por lo que contiene todo su sabor.

Una vez recibimos el pedido y siempre con cuidado y respeto al animarl, lo sacaremos de su caja, perfectamente aislada y refigerada. Meteremos las nécoras en agua fría para evitar que pierda las patas, echaremos 70 gramos de sal por cada litro de agua dulce y las hojas de laurel que en Sabor da Ría enviamos en cada pedido.

Dejaremos hervir las nécoras 7 minutos y las retiraremos del fuego. Esperaremos a que se enfríen y las envolveremos en un paño con el propio agua de cocción y después con un film transparente (o bolsa al vacío), de esta manera lograremos que mantenga con ellas todo el sabor y esencia propia, siempre almacenándolo de la forma más aislada posible para que no se impregne de otros olores.

Decongelar las nécoras

Tenemos que tener claro el día que queremos consumir este producto, ya que será ese mismo día será cuando lo saquemos del congelador. Descongelaremos las nécoras de una forma lenta sin forzarla en un microondas o fuente de calor, por ello las sacaremos del congelador y las meteremos en la nevera. Si por ejemplo, las queremos para cenar, las sacaremos de la nevera a primera hora de la mañana para disfrutarlas en todo su esplendor.

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